Ya estamos en más de 3 Millones de parados en España. El paro afecta a nuestra rutina diaria por tener menos ingresos o ninguno, pero sobre todo para nuestra salud. Se ha demostrado que los parados van más al médico por inseguridad, falta de autoestima o un sentimiento de inutilidad.
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Pero si el paro se alarga en el tiempo, surge la sensación de que hagamos lo que hagamos nada va a cambiar en nuestras vidas.
La indecisión, la soledad y la baja autoestima, es la base de muchos trastornos físicos y psicológicos que sobrevienen con el paro y que atacan de lleno al bienestar y la salud de las personas.
El trabajo nos marca una rutina diaria, cosas como la hora que nos levantamos, el lugar de residencia, cuando comemos y qué comemos, el tiempo que dedicamos a nuestra familia y sobre todo una seguridad y confianza para nosotros y nuestra familia.
Cuando perdemos el trabajo perdemos nuestra rutina y seguridad, nos sentimos perdidos y sin responsabilidades, no somos nada ante la sociedad. Y sobre todo qué dirán nuestros amigos y familiares, mira ese está en paro, ya lo decía yo.
El desempleo puede generar en las personas en paro problemas psíquicos como la depresión, ansiedad, tristeza y estrés.
Pero eso no es nada comparado con no tener ningún ingreso o la finalización del subsidio de paro, a partir de aquí, los síntomas pueden ser una frenética actividad para encontrar trabajo y a su vez tener debilidad y agotamiento que se complica con graves alteraciones de sueño y apetencia sexual.
La familia es la única que puede hacer frente y ayudar a las personas que están desempleadas, esas personas que nunca se hacen notar, en esos momentos son los que ocupan un mayor protagonismo para arropar y ayudar a las personas que necesitan afrontar unos momentos de inseguridad difíciles en su vida.
En fin , la crisis hace escribir post que uno no desearía ………..
Un Saludo de Telepieza.
